Es curioso lo poco que me gustan a mí las despedidas y las vueltas a casa… Durante todo el viaje, en varias ocasiones nos habíamos parado a pensar en lo bien que nos estaba saliendo todo; no se había torcido ni un sólo plan, no habíamos tenido que eliminar nada y todo iba según lo proyectado. Así que a veces, llegué a dudar de que estuviéramos en India 😉
Era todo bastante sospechoso. Mira que somos raros los humanos, que cuando ves que todo va saliendo perfecto, empiezas a sospechar y temes que el futuro te vaya a deparar alguna sorpresilla desagradable 😉
Llegamos a Cochín en autobús desde Allepey, después de haber pasado un día entero en los Backwaters. Pensar que al principio cuando veía los autobuses en India, tan sucios por fuera y tan viejos, me daba hasta miedo entrar, pero después de que viajas en varios ya ves que todo es normal, se te olvida la suciedad y aunque a veces vas algo apretujada, hay buen ambiente y no se viaja mal 🙂
Al llegar a Cochin nos bajamos en la parada donde bajaba más gente… Le echamos un ojo a la lonely planet y decidimos ir a Fort Kochi que era la visita obligada, cogimos el mapa y vimos que había que coger otro autobus. De repente se paró uno justo delante de nosotras; era un autobús estilo comparsa de carnaval, como casi todos en india; lleno de flores de plástico colgadas por todos lados y de corazones, muy alegreee, vamos! XD El busero nos preguntó de donde éramos y nos dijo que subiéramos que nos iba a enseñar Cochín… 😀
Así que subimos tan contentas con aquel tipo tan majo y risueño que nos dijo que no nos sentaramos en los asientos, que nos quedaramos allí delante con él para irnos entrevistando claro 😉
La gente del autobús de reía; el chico que cobraba iba de lo más feliz y todo el tiempo nos miraba y sonreía, luego tiraba de una campanita y cantaba el nombre de la parada y la gente iba bajando 🙂 El conductor empezó a probarse nuestras gafas de sol y mientras nosotras le dábamos nuestra opinión, hacíamos fotos y charlábamos con él animadamente. Aquí lo de prohibido distraer al conductor, nadaaa! ¡creo que no cuenta, vamos!! 😉
Éramos la atracción del autobús y toda la gente nos sonreía , a saber que estarían diciendo de nosotras XD pero resultaba divertido; era como si todos se compincharan para hacernos ver lo divertido que era viajar en autobús urbano en Cochín, para comprobar in situ el buen ambiente de aquella ciudad, menuda carta de presentación 😀 Nosotras estábamos encantadas y viajamos durante mucho rato en aquel autobús del buen rollo, en un ambiente de diversión y desenfado hasta llegar a Fort kochi y ahí nos despedimos de todos y nos dijeron donde podíamos coger el autobús que iba al aeropuerto por la tarde.
Fort kochi y sus impresionantes redes de pesca portuguesas. Cuando llegas a Fort Kochi te encuentras con una gran avenida al lado del puerto donde por supuesto hay un mercado lleno de vendedores y luego gente que trabaja preparando sus barcas o se sienta a descansar mirando al mar; nos hicimos fotos con las redes y regateamos porque había cosas realmente interesantes y además era el último sitio donde podríamos comprar algún regalito en la calle…
Mientras estábamos haciendo nuestras compras, en medio del regateo, de repente apareció Dani, el guipuzcuano al que habíamos conocido en Hampi y que luego nos habíamos vuelto a encontrar en Varkala y que ahora acabábamos de encontrar en Cochin y que casualmente, viajaría esa misma tarde al aeropuerto para coger un vuelo a Bombay que casualmente también era el mismo vuelo que íbamos a coger nosotras, pero él seguiría hasta Delhi desde donde volaría a España dos días después… Ya no sé si el mundo es un pañuelo, una caja de sorpresas o un montón de casualidades, pero a veces ¡»Manda narices»! 😉
Nos alegramos de volver a verlo, acabamos nuestras compras y nos fuimos a comer con él a un restaurante donde había cenado la noche anterior y que le había gustado mucho, pero el restaurante resultó estar cerrado y acabamos en otro muy cercano que tampoco estaba nada mal.
Como ya era costumbre durante nuestro viaje en India, cada vez que llegábamos a un restaurante pedíamos la clave de la wifi y más aún en nuestro caso, que habíamos estado incomunicadas un día entero en los backwaters. Así que me pongo a revisar el email y ¡Oh! ¡sorpresa! «Cancelado su vuelo con easy jet Bombay-Paris por huelga de pilotos :O Oh dios mío!
Lo tuve que leer dos veces, no podía creerlo!l Bárbara miró en su correo y efectivamente tenía el mismo mail…No podía ser que anularan nuestro vuelo a Paris por la huelga de pilotos de Air France… Sin embargo, el vuelo de Mónica y Mayca permanecia sin cambios :O
Comimos y decidimos salir cuanto antes al aeropuerto para ver si podíamos solucionar algo…
Pero lo cierto es que lo único que conseguimos fue ponernos de muy mal humor, porque el despacho de easy jet en el aeropuerto de Cochin no nos hicieron ni caso, pasaban de nosotras ampliamente y atendían a todo bicho viviente que iba llegando antes que a nosotras; nos tuvieron de pie esperando durante casi una hora y sin preguntarnos… el trato fue vergonzoso! Nos pusimos como fieras, pero no nos valió de nada! 😦
Volamos a Bombay y nos depedimos de Dani que continuaba su viaje hasta Delhi. Y allí si que nos encontraron solución enseguida; nos asignaron a un chico que nos acompañó por los distintos mostradores de la compañía y para arreglar lo de nuestro vuelo miró todas las posibles combiinaciones y finalmente nos ofreció salir en un vuelo de la Qatar con destino Doha y luego Doha a Paris llegando a la misma hora a Vigo así que todo perfecto otra vez! 🙂
Nos despedimos de Mónica y Mayca que volaban antes que nosotras y nos fuimos a cenar algo , luego ya con la tarjeta de embarque busqué por todos lados mis productos ayurveda preferidos pero no había ni una sóla tienda Biotique!! 😦 Sólo había las tipicas tiendas de aeropuerto como en cualquier otro sitio así que me volví para casa con las 4,000 rupias que había dejado para ayurvedizarme 😦
Volamos a Doha en la Qatar; era mi primera vez con esta compañía y la verdad que muy bien! 🙂
El aeropuerto de Doha es un lujo, una exhibición de riqueza; muchas tiendas caras, mucho burka y mucho dorado…
Pero lo mejor de todo sin duda; los baños! Además de nuevos y modernos, impecablemente limpios. Después de una temporadita en india, esto sorprende!! 🙂
Recordé que todavía no había hecho Bookcrossing. Creo que porque me había encariñado demasiado con aquel libro y nunca encontraba el momento adecuado para liberarlo; así que decidí hacerlo en Doha; cogí aquel librito que me había regalado mi amiga Carmen y que me había hecho tan buena compañía durante todo el viaje, haciendo que lo viviera más intensamente, si cabe y lo dejé allí; en un asiento de aquel lujoso aeropuerto. Le hice una foto y me alejé, un par de veces me dí la vuelta para ver si aún seguía allí, es de las pocas veces que me ha dado pena liberar un libro.
Un libro muy bonito, mucho más bonito que todo lo que había en aquel aeropuerto junto XD Se titula «El vagón de las mujeres» de una escritora india, Anita Nair. Si tenéis la posiblilidad de leerlo no lo dudéis, a mí me encantó. A lo mejor os lo encontráis por ahí, quién sabe! Yo no he vuelto a saber nada más de él, pero supongo que por algún lado andará… Al quedar en un aeropuerto le habrá sido más fácil volar 🙂
Nos tomamos un zumo de mango y embarcamos para Paris, en Paris todo fue muy rápido; un amable francés, para que luego digan de los franceses… que nos ayudó a llegar de un tren a otro a nuestra terminal y en poco tiempo de nuevo en Vigo… Eso sí,sin las mochilas,que tardaron un par de días en llegar.
Pues nada, ahí estábamos, ya en Vigo… En ese triste momento en el que descubres que la aventura ha terminado. Aquel «Fly to Bombay» que había surgido por el hallazgo de un vuelo barato y la locura de dos enamoradas de la India y que luego había ido tomando forma hasta convertirse en una gran aventura… Había llegado a su fín. 😦
Y por supuesto es ahí cuando decides que es ya hora de ponerse a organizar la siguiente! 😉
Rocio viste como son las cosas! lo que salió al revés fueron los planes con una aerolínea occidental, no con nada de la India! jaja Al menos conociste Doha 😉 Saludos
Me gustaLe gusta a 1 persona
Fue un susto en el momento, pero visto ahora en la distancia estuvo fenomenal! 😀
Me gustaMe gusta
Todo genial, me alegro . Te quería hacer una pregunta , llevaste seguro médico ? Y con que compañía lo hiciste . Graciads . Me voy el jueves
Me gustaMe gusta
Sí nos hicimos un seguro y la verdad que no nos hizo falta que es lo mejor que te puede pasar 😉 Mira en Allianz ( tienen varias modalidades «trotamundos») y el de IATI que es el más popular entre viajeros. Pero yo creo que como voluntario tendrás un seguro durante tu estancia en la fundación. Ay que nervios!! 😉 Muchísima suerte!! Yo me iba el jueves contigo! 🙂
Me gustaMe gusta