Essaouira, الصويرة, Aṣ-Ṣawīra, Esauira…también conocida por la antigua denominación de Mogadur, Mogador en Portugués.
Nos habían dicho que Essaouira no valía la pena, que no había mucho que ver… pero teníamos ganas de algo de relax y yo empezaba a sentir la necesidad de ver el mar. Salimos de Tetuan por la tarde después de haber comido en una «pastillerie»; el único lugar que encontramos abierto en Tetuan por causa del Ramadán y la verdad que nos pusimos las botas! El no encontrar sitios abiertos donde nos dieran de comer nos había creado cierta ansiedad, así que cuando encontramos aquella pastelería, no sabíamos que escoger y queríamos probarlo todo! 😋 La gente entraba para encargar comida para la noche y hasta teníamos la impresión de que nos miraban mal, pero cuando el hambre aprieta… incluso repetimos los zumos y pedimos algo más. Luego habíamos estado un día entero recorriendo la elegante ciudad de Casablanca y el cansancio empezaba a acumularse.
De camino a Essaouuira pudimos oir los cánticos que anunciaban el final del ayuno por aquel día y nuestro conductor paró en un típico bar de carretera para hacer una petit dîner, no había mucho donde escoger, pero como siempre los buenísimos vendedores marroquíes nos supieron aconsejar…_» Lo de este lado no está fresco, mejor coge entre esos!»
En Jadida se bajó la mayor parte de nuestros compañeros de autobús y pronto abandonamos las autovías para meternos por carreteras más estrechas donde daba un poco de miedo cuando aparecía un coche de frente. Cada vez que pasábamos por el medio de un pueblo, nos encontrábamos con una multitud de niños jugando al fútbol en plena calle, era de noche y sus padres charlaban animados en los bares o tomaban el fresco sentados en las terrazas. Como los niños habían puesto la portería en la carretera, cada vez que pasaba un autobús tenían que apartarse para dejarnos pasar y ya de paso, nos saludaban con la mano…
¡El Ramadán mola! No tenía ni idea de lo que suponía el ramadán y viajar por Marruecos coincidiendo con estas fechas ha sido una gran casualidad y una auténtica guinda para el pastel…
Durante el día hay mucha tranquilidad; bares y restaurantes cerrados incluso en los centros comerciales de las ciudades… pero por las noches la gente sale a pasear después de una gran cena y los niños a jugar… hay muchos puestos donde venden comida, dulces o zumos y las calles se llenan. La verdad que nunca me había imaginado que el ramadán fuera así; una auténtica fiesta y que encima dura todo un mes, no es sólo ayuno y mezquitas repletas de gente durante el día, es también la algarabía de la noche que se prolonga hasta la madrugada y gente que come por última vez antes de que amanezca para soportar mejor el día. Como nos había contado Fouad nuestro amigo vendedor de Fez, él se quedaba en la cama hasta casi la una de la tarde para que el día se le hiciera más corto y soportar mejor el hambre…😂 En lo que coinciden todos los musulmanes con los que hemos hablado del tema, es en que el ramadán es buenísimo para su salud, dicen que los médicos lo aconsejan… pero sinceramente, me cuesta creerlo! Sé que siempre se ha hablado de los ayunos y las purgas como algo beneficioso… pero veía a la gente sobre todo a las personas mayores, cansados durante el día. Incluso vimos a un señor que se encontró mal en la calle y tuviron que salir de un negocio a ponerle una silla para que se sentara y traerle un vaso de agua… no comer durante las horas del día supongo que es soportable, pero no beber con tanto calor y teniendo agua, me parece un auténtico martirio. Todas las religiones y las tradiciones, tienen cosas discutibles.
Cuando llegamos a Essaouira nos encontramos con toda la gente en la calle como por los pueblos por los que habíamos ido pasando… Los niños jugando a las diez de la noche con las bicicletas o con la pelotas y los padres charlando animadamente en los bares; otras familias, simplemente tomaban el fresco sentados en los bancos de la plaza. En cuando bajamos del autobús, algunos chavales vinieron a darnos la bienvenida en inglés: «Wellcome to Marruecos» 😄 jajajaja No sabían que estábamos llegando casi al final de nuestro viaje… Cogimos un taxi y le pedimos que nos llevara al centro, no hubo ni que regatear, el chico tenía contador y además era muy agradable, luego recordé lo que había dicho Mayca _Aqui están como más domesticados 😉 … para referirse a que estaban más acostumbrados al turismo e incluso eran más simpáticos. Nos dejó en la entrada de la medina y desde allí y preguntando, llegamos al ryad que habíamos reservado la noche anterior. El Ryad Inna está muy céntrico, la calle estaba llena de gente en las terrazas y algunos nos saludaban al pasar 😄 . Llegar al Inna fue mejor que llegar a casa; salió a recibirnos un chico con una gran sonrisa y nos dijo que «Maybe» quisieramos un té , a lo que como buena gallega respondí: Maybe!! Se rió y nos trajo el té de menta más rico que tomé durante toda nuestra estancia en Marruecos… ¡Estaba riquísimo! 😋 Nos preguntó de que parte de España éramos y que lugares habíamos visitado en Marruecos, luego nos informó del horario y precio del desayuno y nos dió las llaves; de este ryad ya os he hablado en el post de los ryads; nos pareció un lugar ideal; por precio, ubicación y sobre todo por la amabilidad del personal.
Subimos a dejar las cosas en la habitación y salimos a aprovechar el ramadán. Essaouira es un sitio perfecto; un lugar ideal para ir a desconectar y a relajarte….por las callejuelas hay numerosas tiendas con cosas preciosas y a bastante buen precio y caminando hacia la playa te encuentras con cafeterias con enormes terrazas donde tomar algo, todo tiene un cierto aire vintage que resulta muy interesante. A unos pocos metros está el paseo marítimo y el puerto y al fondo la playa; un arenal inmenso y limpio bajo un cielo azul.
Esa noche hacía una temperatura ideal en la calle y los vendedores intentaban colocarnos algo como fuera; nos decían que al dia siguiente no estarían hasta la noche porque era ramadán… Un chico bereber me metió en su tienda y acabé comprándole un colgante con la cruz berever ; que como casi todas las cosas que te venden, te aseguran que te dará suerte y como me hizo un súper precio, también le compré una pulsera que no creo que me ponga nunca…😕 El vendedor, en su afán de convencerme para terminar de meterme en el bote, me dijo que tenía ojos bereberes y me hizo gracia porque la verdad que me debo de mimetizar bien con el ambiente, porque ya en otras ocasiones me han dicho que parezco india, italiana, irlandesa… y ahora berever! Era lo que me faltaba! 😝
Al día siguiente fuimos por el paseo marítimo hasta el puerto y luego entramos en el fuerte de los portugueses; tienes que pagar una cantidad ínfima, no recuerdo si 10 o 20 dirhams y puedes recorrerte el fuerte donde se rodó Juego de tronos… Ahí es también donde está el famoso ojo de buey, desde donde la gente hace fotos de Esaouira. ¡Las imágenes valen la pena! Un montón de barcas azules, en un mar especialmente azul y miles de gaviotas sobrevolando por encima de nosotros. Pescadores trabajando o gente que sencillamente descansa mirando el mar… El ambiente es perfecto y además muy fotogénico. Nos hicimos fotos en el típico ojo de buey que casi se ha convertido en un símbolo de Essaouira, y justo cuando me voy a subir un uno de los cañones para hacer una foto, se me resbala la mochila, se desliza por encima del cañon y se cae al mar… Por supuesto me puse loca y salí corriendo a buscarla, pero la mochila ya iba nadando por dejajo del puente… Entonces les pedí a unos pescadores que iban en una barquita que me la cogieran, pero ellos actuaban al ritmo lento que les dá el ramadán y estaban como pasando de mí… mientras yo me ponía cada vez más loca; pensaba en todo lo que iba dentro de la mochila y era para llorar!! 😨 … el móbil, la tablet, la cartera con el dinero y la tarjeta de crédito… el pasaporteeeeeeee!!😲 el billete de avión!!! 😱 la verdad es que sólo de pensarlo… ví todo negrísimo!! 😭
Pero bueno, es cierto que excepto la muerte , todo tiene solución en esta vida… De repente uno de los hombres que estaba en el puerto, se sacó la ropa y se tiró al agua a por ella… ¡No podía estarle más agradecida! 😘 Por supuesto estaba todo empapado, y ni el mobil, ni la tablet habían sobrevivido, dejándome incomunicada! (No se está mal así tampoco 😉)…el pasaporte estaba completamente mojado, igual que el dinero y la tarjeta de embarque para el vuelo que teníamos esa misma tarde a Madrid… pero aún así, no cundió el pánico, nos fuimos a una terraza, pedimos algo y pusimos las cosas a secar al sol…todo sabía salado!! 😖
A pesar de ese incidente, nada consiguió apagar mi ilusión 😜, ni siquiera oscurecer la maravillosa imagen que me traigo de Essaouira y aunque algo plof!! 😟 Allí seguí sacando fotos, contenta de que al menos mi cámara no estuviera metida también en la mochila 😅 Después de Essaouira quedaba regresar a Marrakech para coger el vuelo de vuelta a casa.
Y como siempre cuando llego a una ciudad por primera vez, me hago la misma pregunta… _¿Podría quedarme a vivir aquí? ¡Pues Sí!! 😍 Sí y además sin ningún problema… Essaouira es una ciudad limpia, tranquila, abierta al mar y con vidilla en sus calles y cafeterías, además está cerca de Marrakech. Es sin duda uno de esos sitios que me apunto para volver … quizás durante cuatro o cinco meses cuando al fín decida retirarme del mundanal ruído 😜
Qué buena actitud ante las catástrofes jajaja yo creo que hubiera infartado allí mismo 😀 Ya me dan ganas de visitar Marrakech y sus alrededores, y fíjate que nunca había sido un destino muy atractivo para mí, ¡pero me has provocado la curiosidad! 🙂 Abrazos
Me gustaLe gusta a 1 persona
Marrakech es conocida como la ciudad roja pero yo la llamaría la ciudad del color, es un verdadero placer para los sentidos; el próximo post será sobre Marrakech 🙂 Fez es de color terracota casi amarillo, Chefchauen es AZUL, Casablanca es blanca y verde por todo el palmeral…Cada ciudad marroquí es diferente pero si algo tienen en común, es que todas son exóticas y muy atractivas.Te gustarán todas! Besos
Me gustaMe gusta
Ohhhhh que bueno que te gustó a pesar del incidente, aunque tuvo un final feliz gracias al lugareño que salió al rescate, parte de la amabilidad de ellos no? Saludos!
Me gustaLe gusta a 1 persona
Creo que le dí pena Rebeca! jajaja Tenías que haber visto mi cara 😉 Pero sí que es cierto, como en todos lados hay un poco de todo pero los amables son especialmente amables 🙂
Me gustaLe gusta a 1 persona
Si me imagino tu cara de desolación! Es que te hubiera arruinado el regreso completamente! Bueno al menos se apiadó de tu cara 😉
Me gustaLe gusta a 1 persona
Me encanto Essaouira cuando lo visite, tengo muy poquitas fotos, vi poco, pero disfrute como una cria. Me volví a ilusionar de mirar a todos lados como hacia tiempo. Me ha encantado leer tu entrada porque he podido recordar todo esto. Menos mal que se arreglo todo en cuanto a la mochila, como digo yo «si esto parece una pelicula, pero si me pasa a mi, nadie hubiera rescatado mi mochila» jaja
Me gustaLe gusta a 1 persona
jajajajaja te aseguro que yo pensé lo mismo que tú! Parecía que nadie iba a ayudarme… cuando ví al chico quitándose la ropa no podía creerlo!! Le iba a dar un beso, pero era ramadán! 😉 Así que le dí cien dirhams mojados 😦 Dios la de cosas que pasan sólo con salir de casa! Y a Essaouira tendremos que volver, que a mí tb me ha sabido a poco!
Me gustaMe gusta