¡Holaa! Entro aquí después de tanto tiempo… que no sé si debería de disculparme por mi ausencia. Eso siempre me recuerda al protagonista de un cuento de Carlos Casares que después de haberse marchado para Argentina sin ni siquiera despedirse de sus padres y sin dar noticias sobre su paradero durante años… Y cuando ya lo daban por muerto: Un buen día de primavera reaparece en el pueblo; entra tranquilamente por la cancilla del jardín, con una sonrisa y tocando el cristal de la ventana de la cocina donde su familia está de sobremesa, saludando con un :_ ¡Yuhuu! Después del susto inicial, al pensar que se trataba de un fantasta… Su padre le muestra su enfado por haberse ido así de casa; como si sus padres lo hubieran echado y más aún por su forma de regresar; después de tanto tiempo sin saber nada de él y llegar como si nada; con un: _¡Yuhuu!
Por suerte para él las lágrimas de su madre y sus hermanas, emocionadas de verle, le salvan de lo que podía haber terminado en un buen altercado.
No sé si cada vez que falto tanto tiempo de aquí debo de justificarme o si entrar con un simple _Yuhuuu! será suficiente 😜 Pero lo que sí os diré es que he vuelto porque por fín he sentido la necesidad de escribir … y eso hay que aprovecharlo!
Para que me entendáis, trataré de poneros en contexto: Hace ya muchos años me fui a Filadelfia, EEUU, a hacer un voluntariado (Yo también quería tener mi experiencia Americana). Fue una experiencia interesante de la que aprendí mucho y de la que hay algunas cosas escritas en los cuadernos de viajes ( Mi gran aventura americana)… En esos tiempos, quizás algo más que ahora, estaba muy interesada en la gente; me encantaba sociabilizar con personas de diferentes culturas, practicar idiomas, aprender cosas nuevas… y en esos cuadernos viajeros le dedico una entrada a cada uno de mis compañeros de voluntariado… Solo de Yukari, mi compañera japonesa, he vuelto a saber algo.
Mucho tiempo después de aquel viaje y estando en una clase de italiano en la escuela de idiomas, nos pidieron que escribiéramos sobre alguien a quien admiráramos, algún ídolo… y de repente y después de pensar un rato, llegó a mi mente Gerry, Gerald Sterret, y así fue como escribí mi redacción de ciento ciencuenta palabras en italiano, hablando sobre él.
No me gusta idolatrar a nadie; admiro las trayectorias de algunas personas, su talento, su coherencia de vivir acorde con lo que piensan… y algunas veces también admiro la perseverancia que tienen algunos para conseguir sus objetivos… pero sé que esas personas son tan humanas como yo y tendrán sus complejos, sus defectos y sus problemas … justo como cualquiera!
De Gerry me había sorprendido su capacidad de aceptación, su equilibrio mental, su calma ante cualquier suceso por muy inesperado o desagradable que fuera… (Además Gerry era el único que caminaba tranquilamente y hablaba despacio y en tono suave en aquella comunidad donde todos parecían caminar con ritmo y hacían los mismos gestos y movimientos al hablar que «el príncipe de Bel air») 😉 Debe de ser cierto que cada uno admira lo que no tiene, porque yo por aquel entonces era una persona muy inquieta y aunque nunca he llegado a caminar con ese ritmo y ese flow 😅 , creo que estaba más cerca del «team locura» que del «team relajado«.
Con Gerry se podía hablar casi de cualquier tema; se veía una persona experimentada … Conocía España, había vivido en Países Bajos… también en Brasil, donde se había casado y había hecho el intento de fundar una ONG para ayudar a «Os meninos da rua» pero en un viaje a Filadelfia para ver a su familia ;decidió que allí también había mucho que hacer… Y fue entonces cuando fundó Second mile center; una ONG para ayudar a expresidiarios, a desempleados de larga duración y a inmigrantes a reinsertarse y a encontrar trabajo. El proyecto consta de varias tiendas de segunda mano ; aceptan cualquier donativo; desde un juguete, ropa, un sofá y hasta un coche … luego se limpia, se comprueba que funcione o esté en buen estado y se vende en la tienda con el fín de darle una nueva vida y al mismo tiempo proporcionar trabajo a las personas que se encargan de lavar, coser y planchar la ropa…o de limpiar y de ayudar como dependientes en la tienda.
Para poner en funcionamiento una nueva tienda en el área universitaria de Pensilvania, llegamos nosotros; un grupito de voluntarios europeos ( Yo la única española) y dos japoneses y así fue como también nos encontramos con una familia temporal que se preocupaba por nosotros; nos cuidaba para que no nos pasara nada e incluso nos sorprendía cantando » We are family» 🎤😂
Hace un par de meses, mi hermana viajaba a Filadefia por un tema de trabajo y entre mis recomendaciones estaban; visitar el museo de arte moderno de Phily donde se expone el archiconocido cuadro de Van Gogh «Sunflowers» y si podía; que se pasara por Second Mile Center… Mis recuerdos de la ciudad de Filadelfia se resumían en que era una ciudad llena de gente extremadamente educada y amable… Estuvo en el museo y también dió fe de la educación y amabilidad de la gente pero no pudo pasar por la tienda que yo había ayudado a montar y que suponía que seguía existiendo, aunque hacía mucho tiempo que no sabía nada de ellos… Así que entré a facebook buscando información actualizada de Second Mile Center y para mi sorpresa, revisando la página, me encontré con un triste anuncio de hacía ya seis años.
The Second Mile Center Family is deeply saddened to announce the passing of Gerald Sterrett (Mr Gerry) on Friday, May 4, 2018.
The Second Mile Center
Gerry was the Founder of The Second Mile Center…
Fue como darse un golpe repentino con la realidad; ¡Gerry había muerto hacía seis años! Por su edad, por el ritmo de la vida… debía de habérmelo imaginado… pero en mi cabeza toda aquella gente que conocí en Filadelfia seguía viva; haciendo desayunos para sociabilizar ( Aquellos desayunos no obligatorios que me perdí tantas veces por no madrugar… hasta que Thomas me dijo que valía la pena ir; que cada uno contaba su vida y que algunas veces era realmente interesante! Serán cotillas los alemanes… Madrugar para cotillear! 😱 Desde ese momento decidí levantarme temprano e ir a ver que se cocía allí… ja ja En los desayunos cada uno contaba como había logrado salir de una situación difícil o superado una adicción y otras cosas bastante personales, que contaban sin ningún pudor)… Yo me los seguía imaginando yendo de excursión a visitar a los Amish o parando en el bar de carretera donde se come el mejor cheesesteak de la ciudad … Y otra vez recordé un libro de esos juveniles que leí en la infancia donde un chico recibía cada mes los huevos caseros que le enviaba su madre desde el pueblo y para que no se rompieran; los envolvía en papel de periódico… Al desenvolver uno de los huevos se encontró con la esquela de defunción de su amigo, que habia muerto meses atrás… Es sorprendente la forma en que algunas noticias llegan hasta nosotros.
Gerry tenía la capacidad de no irritarse nunca y de comprenderlo todo…de no enfadarse,ni escandalizarse… de normalizar, o más bien de aceptar las cosas como vienen… Recuerdo el último día que estuve con él: Era mi último día en Filadelfia y cuando ya todos se habían ido; hice mi maleta, limpié un poco la casa, comí lo que quedaba en la nevera , me duché y salí sola a explorar y a despedirme de la ciudad… Mi avión salía al atardecer y Gerry vendría a recogerme para llevarme al aeropuerto.
Recorrí las calles fijándome en cada detalle; haciendo fotos , parándome en cada esquina… y luego caminé hacia mi librería preferida de Phily, que estaba muy cerca de donde vivíamos; en la zona universitaria…Era una librería grande; de varias plantas y enormes ventanales por donde entraba un montón de luz;con zona de lectura y hasta una cafetería… Con muchas cosas preciosas en la zona de papelería, que es mi perdición… 😉 y me compré una libreta de gatos donde escribí mis aventuras de aquel viaje y también un regalo de despedida para Gerry.


Bajé por última vez las escaleras de aquel piso donde había compartido tan buenos ratos con mis compañeros y me quedé a esperar a Gerry en la calle, que apareció puntualmente. Me ayudó a meter la maleta y yo le entregué las llaves del piso… Después me preguntó qué tal había ido el día y le dije que estaba un poco triste porque había ido a recoger las copias de unas fotos a la tienda y estaba cerrada… Él como siempre dando soluciones; me dijo que no había problema, que él las recogería y me las haría llegar.
De camino al aeropuerto tuvimos una interesante conversación ; le pregunté si alguna vez aquella gente a la que había ayudado le había defraudado y me dijo que sí sin inmutarse, que era algo habitual ; que mucha gente volvía al juego, a la bebida … que él sabía que podía pasar pero que eso no le desanimaba.
Luego me preguntó por los otros chicos del grupo, si ya se habían ido todos y le dije que sí excepto Ahamed; que era un chico de origen marroquí con pasaporte italiano que había estado haciendo entrevistas para quedarse a trabajar en EEUU de forma ilegal … Suponía que Gerry lo sabría, porque él sabía todo! Pero quería ver su reacción…Gerry siguió conduciendo sin inmutarse ni decir nada…Y yo pude comprobar que nada de que lo dijera, iba a dañar la calma de aquel hombre ni lo más mínimo.
Me preguntó en qué aerolínea volaba «KLM»_ respondí. Y me llevó a la puerta de salidas; bajó mi maleta, le dí el regalo,me dió un abrazo y yo le devolví los dos besos que había puesto de moda en aquel barrio de Phily y que tanta gracia hacían en la comunidad… Y esa fue la última vez que ví a Gerry … Unos quince días después recibí un sobre con las fotos que había llevado a revelar .
Muchas veces me encantaría tener esa calma, esa tranquilidad y ese equilibrio, que solo encuentro en algunas personas… Y entonces me compro una pulsera de piedras de obsidiana con siete piedras de colores para alinear mis chakras … Siempre con la esperanza de parecerme más a ellos. 😉 Pienso que así, algún día, aún cuando me juzguen o me critiquen de forma injusta…Podré enfrentarme al mundo con una sonrisa, sin que me duela, sin inmutarme, con ese superpoder que solo te da la confianza de estarlo haciendo bien o al menos de estar haciéndolo lo mejor que sabes… y librarme de esa necesidad que tengo siempre de tratar de aclararlo todo para defender mi verdad… porque total; de poner las cosas en su sitio, ya se encarga el tiempo!
RIP GERRY ¡Gracias por todo! Y que la tierra te sea leve 🙌 ❤️


Muchas gracias por compartir tus experiencias. Acabo de, casualmente, descubrirte y me siento contenta y agradecida.
Buena Jornada de Prinavera
África Quesada
Venecia, 24 de marzo ‘25
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Muchas gracias, África!
Yo también me siento contenta y muy agradecida de recibir tu mensaje! Así que ya es mutuo 😉
¡Qué tengas un buen día y gracias por tu visita! 🙂
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