Hay un lugar en el mundo, al sur de Vietnam que se llama así; el nombre procede del francés Cochinchine y fue adaptado por los españoles como Conchinchina. Por la lejanía del país y el exotismo de su nombre, hizo que se identificara a la Conchinchina con sinónimo de lugar remoto; irse a la Conchinchina sonababa como viajar a un lugar muy lejano y extraño, casi imaginario…
Todo esto para deciros que la Conchinchina, no figuraba en el primer puesto de mis preferencias viajeras pero como ya sabéis los que me leéis, nunca le he hecho asquitos a ningún destino… Cualquier lugar del mundo es bueno cuando los planes son infinitos! 😃
Todos los viajes empiezan bastante antes del día de partida. Casi siempre se van incubando; como los huevos o también como algunas las enfermedades🤔 🥵 y luego se pasan volando… dejándonos un regustillo que nos hace sonreír al recordarlos.
Y así empezó también este: Con un _Sí!
Llegó el 17 de Mayo, festivo en Galicia, y me pilló caminando por los salvajes acantilados de la Costa da Morte; entre el ruído de las olas rompiendo contra las rocas y el soplido ensordecedor del viento, que me impidió oír el teléfono … Cuando llegamos al faro, devolví la llamada… y aún con el ruído del viento en la cabeza, acepté la propuesta de viajar a Vietnam, sin pensar! Desde ese momento, supe que estaba abriendo la puerta a un montón de historias y de nuevas aventuras…
Como la vida no siempre es de color de rosa y además ella misma se encarga de recordárnoslo… Empecé a encontrar ciertas complicaciones en aquel viaje; para empezar era un grupo demasiado grande e impar! Lo de impar puede parecer una tontería, pero no lo es; sobre todo para hacer actividades como kayak o para compartir habitación, además en un grupo tan grande es más difícil decidir cosas y llegar a acuerdos y hay un riesgo muy elevado de que termine dividido… Por otro lado hay que recordar que somos aventurer@s; si estuviéramos hablando de un viaje organizado no importaría que el grupo fuera grande… pero sólo teníamos un billete de ida y vuelta, un seguro de viaje, un vuelo interno comprado la semana anterior a nuestra salida y la reserva de hotel para las primeras noches en Ho Chi Minh…
Sé por experiencia, que los viajes además de traernos momentos mágicos e irrepetibles , casi siempre traen otros que no lo son tanto….Y me enfrentaba a algo que no había probado aún; un nuevo grupo formado por tres compañeros y amigos de mi último viaje a Asia , con los que sabía que todo sería fácil… y gente nueva que todavía suponían un misterio y que trataba de analizar en cada comentario que hacían en el foro y en el grupo de whasapp…😅 Lo bueno era que esta vez no era yo sola la que analizaba a los nuevos viajeros, esta vez podía compartir sensaciones con mis viejos compañeros de viaje y hablábamos del «buen rollo que nos daba este o aquella» mientras se iba aproximando la fecha del viaje….
He de reconocer que esta vez quise ser muy clara para evitar problemas causados muchas veces por la falta de información y uno de los últimos días antes del viaje les solté un»rollo patatero» de esos que si no te lo esperas debes de pensar: «Esta tía es de una secta o está como una maraca…»🤣🤣 En el discurso que todavía andará por el grupo de whasapp les pedía paciencia, positividad y buen rollo … Y les confesaba que mi única preocupación (podemos llamarle MiedoRRR!!) era que el grupo funcionara como un equipo; al convivir con tanta gente tantas horas al día, es normal que surjan problemas; desacuerdos, malentendidos, discusiones…que en muchos casos son inevitables y ni siquiera se trata de evitarlos, si no de saber sobrellevarlos y flexibilizar al máximo…En un equipo saludable, todo tienen solución.
Y se formó! Regresados ya de nuestra aventura por la Conchinchina, os puedo decir que este ha sido el mejor grupo con el que he tratado nunca porque ha sabido adaptarse a todas las situaciones y no he visto en ningún momento una mala cara o una negativa sin fundamento… Si había dos opciones y una era más aventurera y más arriesgada, esa era la escogida! 💪 Ha habido una adaptabilidad total al medio por parte de todos los integrantes; si había que viajar en sleeper bus, todos felices! Si había que dormir en un «nicho» o en el suelo, se dormía y todos tan contentos! ….y si nos quedábamos en un hotel más lujoso; se disfrutaba de los placeres de la piscina, los masajes y los buenos desayunos.
Es cierto que por un momento, aunque puede que solo fuera fruto de mi imaginación… empecé a percibir extraños movimientos de búsqueda de aliad@s y tuve la sensación de que podíamos estarnos aproximando a un motín a bordo, un motín que nunca llegó a producirse…supongo que por falta de apoyos. Y eso es algo que hay que agradecerle sinceramente al grupo, que permaneció unido en busca del bien común! 😁😁 Sí! ya sé!! Juego de tronos ha hecho mucho daño!! 🤫😅
Este país, que nunca había sido mi primera opción de viaje, se ha convertido en un país muy especial que me ha dejado un montón de buenas sensaciones que he tratado de resumir en unas pocas líneas que un día, colgué en instagram :
Acabamos de regresar de la tierra de los farolillos, la tierra de los sombreros cónicos «Nón lá» ; que igual sirven para el sol que para la lluvia.
La tierra del arroz y de los noodles, de las motos, de las bicis, de las cestas transportadas con un palo en medio…La tierra de las mujeres listas y trabajadoras, de los niñ@s felices y sonrientes que te persiguen por los campos de arroz…
La tierra del agua y el verde infinito, de las cuevas y las montañas cársticas…
La tierra que me ha devuelto al café; el mejor de todo el sudeste asiático.
El país que nunca duerme y donde nadie te entiende. El país con el idioma más dificil de todos en los que he estado…
Un país lleno de gente fuerte, aunque ellos no se lo crean… Un país de superviventes que tienen la guerra muy presente.
Y nos hemos despedido de Vietnam con una «Bia Hoi» en un bar local, donde el suelo estaba lleno de suciedad y servilletas que un chico ha venido a barrernos de entre los pies..Sentados en un taburete como los de las garderías, hemos pedido nuestras cervezas y los vecinos de mesa nos han invitado a torta de sésamo que hemos aceptado a la primera, luego los hemos querido invitar, y han venido a darnos la mano de la forma que lo hacen los vietnamitas cogiendo tu mano entre las suyas…😊
Ha sido una experiencia tan bonita, que nos hemos venido arriba y hasta nos hemos puesto a cantar … Vietnam nos ha regalado tantas cosas buenas, que será dificil de olvidar! 💚
Os echo de menos mis queridos eleven people! 🤗🌏
Y este es sólo es el principio de lo que fueron 21 días de viaje y aventura por Vietnam casi todo en modo road trip de Sur a Norte. Había leído que Vietnam era uno de los países más rudos del Sudeste Asiático y os puedo asegurar que para nosotros no lo fue en absoluto, aunque como buena gallega, os diría que «haberlas hailas» y también dimos con alguno de esos vietnamitas bordes y rudos, pero que en la balanza ni cuentan!
Si os apetece seguir nuestro viaje por la Conchinchina, nuestra historia; aventuras y desventuras… así como conocer mejor el país del sol naciente; os invito a seguir cada viernes el artículo semanal donde nos adentraremos y descubriremos una nueva ciudad Vietnamita. No te pierdas nada y vente con nosotr@s a la Conchinchina! 😉