South Beach, Aqaba

La perla Jordana del Mar Rojo

Áqaba es la ciudad más austral de Jordania y la única que tiene salida al mar, está situada en el Golfo de Aqaba, en el mar Rojo, que hace de frontera natural entre Egipto, Jordania y Arabia Saudí. El puerto de Aqaba es el único puerto de Jordania y por su situación estratégica ha sido fundamental para el comercio entre Asia y África … Además de ser el principal centro de veraneo para los jordanos, Aqaba se ha convertido en un importante destino turístico de diversión y aventura ; a la amplia oferta de actividades y las buenas infraestructura hoteleras, se suman la calidad de sus playas; aptas para la práctica del windsurf y su sorprendente arrecife de coral, que es el mejor reclamo para buceadores y ha hecho que proliferen los centros de buceo, sobre todo en la zona de South Beach.

Salimos de Wadi Rum en dirección Aqaba e hicimos una parada para comer en el camino. Aunque Aqaba está a solo 60 kilómetros de Wadi Rum el paisaje cambia por completo y nada más llegar a Aqaba descubrimos una moderna y cosmopolita ciudad portuaria con palmerales y edificios de nueva construcción… Un paisaje diferente a todo lo que habíamos visto hasta el momento. En la furgoneta se comentaba que por su aspecto podría ser cualquier población turística de la costa mediterránea…

Atravesamos la ciudad y continuamos nuestro recorrido por la costa hasta llegar a South Beach; un lugar perfecto para disfrutar de la playa y de los deportes acuáticos… Nuestro alojamiento, Aqaba Adventue driver resort, no estaba en primera línea playa pero tenía una piscina en el centro que se llevaba todo el protagonismo… y eso ya es un puntazo cuando llegas a un sitio donde hace tanto calor ; el diseño del edificio y la decoración son muy originales; un centro de buceo convertido en hotel; todas las habitaciones dan a la piscina y en cada puerta hay un mural de un animal marino… Es original y bonito aunque luego las habitaciones son muy justitas de tamaño y al amanecer entra demasiada luz, pero tanto la amabilidad y la profesionalidad del personal, como todo el servicio en general del centro, compensan estos fallos de diseño…

Yo no quería, no tenía ningunas ganas de llegar a Aqaba ni siquiera de hablar de ella porque sabía lo que suponía… Cuando estoy bien lo que quiero es que dure y no me apetece nada apurar el futuro… La misma sensación que cuando ibas a la playa en pleno verano y te encontrabas con enormes vallas publicitarias que ponían «La vuelta al cole en El Corte Inglés» Aún no he podido superarlo! 😓

A veces tengo la impresión de que el mundo se divide entre dos tipos de personas ; las que están muy felices y entusiasmadas al principio del viaje e incluso antes de que empiece… pero con el paso de los días empiezan a sentir morriña y a echar de menos su casa, su familia, su perro, su gato y hasta la almohada… y luego estamos los que nos cuesta arrancar y vamos medio a rastras… con el equipaje sin hacer hasta la última hora y sin exceso de espectativas pero en cuanto le pillamos el gustillo, ya no queremos regresar! Y cuando vemos que el final se acerca, evitamos hablar del tema, en un último intento de frenarlo como sea… 😬

Al bajarnos de la furgo sentimos tanto calor como si acabaramos de aparcar en un horno; yo ya he adoptado la frase «Hace más calor que en Aqaba» a la que le he sacado bastante partido durante este tórrido verano… Por suerte estaba la piscina y poco tardamos en hacer buen uso de ella...Sólo hubo una cosa que me gustó más que la piscina y es que cuando llegamos al hotel, al ir a recepción para hacer el check in y que nos dieran las llaves, yo ya estaba sugiriendo que cada uno se metiera donde le apeteciera, cuando oí decir :_» ¡Queremos sorteo! No va a haber sorteo?» 😃 Se había cumplido con creces lo de hacer sorteo de habitaciones para interaccionar entre todos y conocernos , lo de seguir queriendo sorteo para compartir habitación era un indicativo más del buen equipo que habíamos formado y que demostraba que no había predilecciones, que no se habían hecho grupos! 😊

Tawfeeq, nuestro conductor, nos dió un toque para preguntarnos si queríamos que viniera a recogernos para llevarnos a Aqaba. Él estaba en la casa de un amigo también en South Beach y aunque estábamos tan felices y relajad@s que todavía no sabíamos mucho lo que queríamos … después de un tiempo de piscineo, de ducharnos y de comtemplar la puesta de sol… bajamos a la ciudad, aún sin decidir lo que haríamos al día siguiente… Habíamos hablado con los chicos del centro de buceo que nos dieron varias opciones y les dijimos que les contestaríamos por whatsapp…

En Aqaba queríamos probar el pescado, que es la comida más recomendada y fuimos a cenar a Al-Shami, un restaurante situado justo en frente de la mezquita. Cenamos en la terraza, el restaurante estaba lleno y había mucha gente local… Cuando estábamos cenando empezamos a oír los rezos de la Mezquita ( Nuestro Manolo) pero allí nadie se inmutó; mientras que en el Norte de África la gente al oír los rezos, deja todo lo que está haciendo para tirarse al suelo y ponerse a rezar, los jordanos siguen cenando como si nada. Durante la cena decidimos lo que íbamos a hacer al día siguiente; aunque algun@s del grupo bucean, decidieron unirse a los que querían hacer snorkel para ir todos juntos y compartir la actividad… y le enviamos un whatsapp al centro de buceo para alquilar el equipo de snorkel para tod@s y contratar un monitor que nos acompañara la mañana siguiente…

Después de levantarnos y desayunar, nos probamos y recogimos los equipos de snorkel y nos fuimos con nuestro monitor a la playa en un jeep… El jardín japonés es una maravilla; nunca había visto tantas cosas bonitas juntas y tan cerca de la superficie…Corales increíbles, peces de colores, algas… y hasta un tanque de guerra sumergido! 😃 Fue muy buena experiencia aunque yo soy una pupas y salí llena de heridas provocadas por los corales y también con un sarpullido por la reacción a algún ser vivo que tardó dos semanas en curarse! 😅 Antes achacaba todos mis accidentes a mi mala suerte, ahora soy consciente de que siempre he sido un poco kamikaze y aunque trato controlarme, no siempre lo consigo! 🙄 Cuando salimos del agua vimos que la arena quemaba tanto que no se podía ni andar… además habíamos dejado las cosas bastante lejos de allí… Y cuando ya estás pensando en tomarte un Red bull para que te de alas o dejarte morir como una ballena varada en la arena, apareció Edimburgo con nuestras chanclas! 😀 En otros tiempos esto se habría considerado casi un milagro e iniciarían el proceso de beatificación de Edimburgo de los siete mares o algo…😉 Ahora solo se agradece que alguien sea tan empático y súper amable 🤗. Estella y yo nos calzamos y nos fuimos caminando tranquilamente por la arena…

Al parte de accidentes se sumó el accidente más exótico, protagonizado por Barcelona, la misma que la noche anterior había acudido a la cena con una original falda hecha con la «palestina»; le picó un erizo en una mano, que además de doloroso es curioso de ver… Aunque tenía unas pinzas de depilar en la mochila, nuestro monitor nos dijo que era mejor dejar las púas de erizo tranquilas hasta llegar al hotel y allí le hicieron meter la mano en una taza de agua hirviendo y poco a poco las púas fueron desapareciendo... 🦔😀

Para cuando regresamos ya casi era la hora de comer y comimos en el centro. Teníamos toda la tarde por delante… Las chicas enviaron un mensaje para decir que estaban en la piscina pero estaba tan bien tumbada en la cama debajo del ventilador que salí de la habitación con intención de ir a la piscina y volví a entrar! El calor de Aqaba es matador! En la habitación Barracuda pensamos que estaría bien en lugar de ir al zoco de Aqaba la mañana siguiente, bajar esa misma tarde al zoco y a cenar… y al día siguiente hacer el viaje de vuelta sin parar hasta Ammán, donde queríamos hacer unas compras… y luego regresar a Madaba donde esperaríamos la hora de nuestro vuelo de vuelta a España.

En principio nos habíamos despedido de Tawfeeq hasta el día siguiente y fui a preguntar cuanto costaba un taxi desde South Beach , pero justo cuando las chicas estaban preguntando por qué no podía llevarnos Tawfeeq… Tawfeeq cometió el error de enviarme un mensaje para preguntar qué tal estábamos y si necesitábamos algo 😁 y ya aproveché para preguntarle si podía venir a recogernos para llevarnos a Aqaba… Así que nuevamente después de ducharnos y de ver la puesta de sol desde la terraza del hotel nos fuimos a Aqaba… Reservamos mesa, esta vez en el restaurante Ali Baba que es un restaurante algo más occidental y también más caro que el Al-Shami pero además de que la comida está muy buena, se puede consumir alcohol. Después de hacer la reserva nos fuimos al Zoco de Aqaba, que no tiene nada que ver con el de Ammán… Este es mucho más occidental, más ordenado y está formado por tiendas donde puedes comprar de todo; especias, frutos secos, cosméticos , souvenirs… Además Aqaba es zona portuaria libre de impuestos por lo que también puedes encontrar bebidas alcohólicas y cervezas a buen precio! 💰

Después de hacer algunas compras nos fuimos al restaurante y disfrutamos de una cena muy agradable pero como siempre que bebía una cerveza en Jordania, empezaba a sentir como si flotara en una nube… las cervezas en Jordania serán caras pero te tomas una y te hace el efecto de diez! 😉

Habíamos decidido seguir cumpliendo todos los planes; el día siguiente saldríamos temprano de Aqaba e iríamos a Ammán a comer y al zoco … Luego volveríamos a Madaba a ducharnos y a esperar nuestro vuelo de vuelta a España…y así fue! 👌

Este post iba a ser el último de esta serie pero en mi intento por frenar el final de la aventura os cito para el próximo viernes donde os contaré como fue nuestro último día de viaje en Jordania; un día de furgoneta, cansancio, reencuentros y también de despedidas…

Gracias a todos por seguir ahí y gracias a Edimburgo de los siete mares por compartir las fotos de uno de sus mares con nosotr@s! 😉

¡Nos vemos el viernes! Un abrazo para tod@s! 🤗