
Las maravillosas ruínas de Angkor Wat declaradas Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, los mercados nocturnos y tradicionales, los pueblos flotantes, los paseos en calesa, los nuevos amigos y los reencuentros con nuestros «viejos amigos» de alma mochilera… Nuestros días en Siem Reap fueron como un musical; y es que nuestro paso por Camboya, dio mucho de sí! 😊
